Una sentencia reciente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) condena a un trabajador por reenviar correos electrónicos desde el correo corporativo de la empresa a su dirección personal, con documentos adjuntos que contenían datos personales de los clientes (nombres y apellidos, DNI, teléfonos, direcciones postales, códigos de pólizas, etcétera). La sala aprecia en esta acción un claro abuso de confianza y deslealtad.
A este respecto la normativa interna de la empresa prohibía, expresamente y por razones de seguridad, el reenvío de mensajes y documentos corporativos a cuentas privadas del trabajador, así como de sus familiares o amigos.
Por todo ello el TSJ declaró el despido como procedente al observar un claro incumplimiento de las normas internas de la empresa, no encontrando justificación alguna a dicho comportamiento.
*Fuente de la información ‘Economistjurist’.
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