Hoy en día en las empresas de todos los sectores y países conviven veteranos, baby boomers, generación X, millenials, provocando un choque generacional que, mal gestionados, puede provocar el fracaso de una empresa, y bien llevado contribuir al éxito de la misma.

Esas generaciones de las que hablamos poseen una serie particularidades: se comunican de forma diferente, razonan diferente, interactúan, trabajan y visualizan los objetos y su compromiso organizacional de forma muy distinta. Todo ello se traduce, en el contexto empresarial, en una tarea titánica para directivos y responsables de recursos humanos, teniendo que gestionara un clima laboral concreto que puede llegar a dañar la continuidad de los proyectos.

A continuación vamos a ver una serie de claves y consejos a tener en cuenta, como empresa, para evitar ese choque generacional del que hablamos.

  1. Revolucionar el concepto jefe/líder. Esa persona ha de convertirse en un líder multigeneraciones, encargado de guiar este modelo lidiando con los distintos estilos para que se engranen a la perfección. Sería interesando establecer, por ejemplo, programas de mentoría reversa e inversa.
  2. Adoptar las tendencias tecnológicas a su sistema de negocio.
  3. Flexibilidad e innovación.
  4. Modificaciones del espacio físico donde trabajen, que resulten eficientes para una cultura de trabajo en equipo. Un ejemplo de ello puede ser el coworking, que proporcionan espacios accesibles y abiertos para correlacionarse líderes organizacionales y colaboradores.
  5. Reconocer el trabajo. Parte de las herramientas de motivación y retención de la fuerza laboral millenials pueden ser programas de evaluación de desempeño y reconocimiento de la buena labor. Lo ideal es realizarlos con frecuencia o, al menos, con periodicidad cercana.
  6. No perder de vista nunca a la competencia. Es muy importante generar sinergias que entrelacen la diversidad de talento y experiencia multigeneracional. Así los veteranos necesitan ser escuchados y guiados por otros, y esas características pueden hacer una sinergia perfecta con la de los baby boomers de realizar tomas de decisiones participativas (así se fortalecerán también las buenas relaciones con los colegas y supervisores).

Por último, pero no por ello menos importante, los millenials, generación laboral cuya retención y motivación constituyen uno de los principales retos de las organizaciones, necesitan que se gestionen sus expectativas. Para ello es necesario implantar una cultura de oficina emocionante y con un ambiente motivacional donde haya oportunidades de crecimiento personal y con sentimiento de pertenencia (son una generación que necesita sentirse empoderada).

*Fuente de la información ‘El Economista’.

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