Según se desprende del Módulo sobre la Actividad por Cuenta Propia de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en España había, en 2017, un total de 3.042.200 autónomos, y el 21,4% de ellos (unos 650.000) deseaba trabajar como asalariado.
Este deseo es mayor entre las mujeres (23,5%) que entre los hombres (20,31%). Sin embargo, entre los asalariados, solo el 10% preferiría trabajar por cuenta propia. Una tasa en este caso que es superior entre los hombres (11,2%) que entre las mujeres (8,4%).
Entre los ocupados que están contentos con su situación profesional y no desean cambiarla se encuentran casi el 70% de los autónomos y el 84,8% de los asalariados.
Respecto al motivo por el que decidieron trabajar por cuenta propia:
- Uno de cada cuatro autónomos señala que lo hizo para continuar con un negocio familiar, una situación que se da en mayor medida en el caso de aquellos que tienen asalariados.
- Aprovecharon una buena oportunidad (en el 22,5% de los casos).
- Se trata de la práctica habitual en la actividad que realiza (13,6%).
Pero no todos van a ser ventajas, y en cuanto a los inconvenientes, las mayores dificultades para los trabajadores por cuenta propia fueron:
- Los periodos sin clientes, sin pedido o sin proyecto en el que trabajar (13,5%).
- El retraso o la falta de cobro (11,7%).
- Tener que adecuar su horario de trabajo por la afluencia de clientes (10%).
En 2017, tres de cada cuatro autónomos declararon que no tenían intención de contratar empleados o subcontratar trabajos o servicios, situación que se registró más entre aquellos que no tenían ningún trabajador bajo sus órdenes o entre miembros de cooperativas. Por su parte, sólo el 1,9% de los autónomos tenía intención de contratar indefinidos, mientras que el 6,4 % sólo emplearía a temporales.
*Fuente de la información ‘El Economista’.
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