En el mundo actual las empresas y las redes sociales van de la mano. Una empresa que no tenga presencia en Internet no existe. Si no estás visible no te conocerán y no podrán comprar tu producto o servicio. Además las redes pueden servirte de canal de comunicación directa con el cliente.  

Además la relación entre comunicación y marketing es directa, siendo fundamental aquí el papel de las redes sociales. La idea de las empresas es crear, a través de sus publicaciones, el mayor impacto posible en el cliente potencial. Así se quedan con las ‘ganas’ de buscarte, llamarte, conocerte más. 

Si nos centramos en el marketing, las redes sociales son un canal más de comunicación dentro de la estrategia que sigamos. Eso sí, en Internet existe demasiado contenido, mucho del cual es “fake”. Por ello es fundamental saber diferenciarse del resto. 

Los usuarios se han acostumbrado a acudir a las redes sociales para preguntar, criticar o, incluso, insultar a la empresa. Aquí juega un papel muy importante la figura del community manager. Este debe tener paciencia y estar preparado para gestionar todo tipo de críticas y problemas que puedan surgir. Eso sí, siempre con sentido común y evitando, en la medida de lo posible, situaciones conflictivas que afecten a la reputación de la empresa. 

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